El objetivo de este post es detenernos a reflexionar sobre las nuevas narrativas que estamos viendo en ficciones audiovisuales de los últimos años. No es nada nuevo hablar de Transmedia, de narrativas expansivas e inmersivas que engloban diferentes medios y que conforman una narrativa superior, un universo, en el que se desarrollan multitud de historias con diferentes personajes. El “Universo Cinematográfico de Marvel” (MCU) es un sencillo ejemplo de esto, con la narrativa serial cinematográfica como “nave nodriza” o discurso principal de la experiencia a la que se suman cómics (creados nuevos para este MCU),
webisodios y diferentes series tanto en plataformas OTT de “Vídeo On Demand” (VOD) como en canales de televisión lineales y en abierto. A día de hoy, “las puertas de entrada” al MCU son numerosas e incluso el concepto de “nave nodriza” deja de tener sentido con una hiperconectividad tan compleja. Otro ejemplo más longevo podría ser
Star Wars,
que continúa expandiendo y mirando hacia delante (
con o sin sus fans), o
Harry Potter, con rumores sobre una posible serie televisiva y
un juego de realidad aumentada a lo “Pokemon Go” en desarrollo.